Según la agenda que se confirmó, el Santo Padre estará un día en Bogotá donde tendrá encuentros con el gobierno, el Consejo Episcopal de Latinoamérica (Celam) y con un grupo de jóvenes. Asimismo, celebrará una eucaristía en horas de la tarde a la que se espera la asistencia de unas 500.000 personas.
En su segundo día el pontífice visitará Villavicencio, capital del Meta, donde por muchos años la violencia de la guerrilla y de los paramilitares resonó por muchas poblaciones cercanas.
Francisco seguirá su recorrido por Medellín, donde tocará temas como la vocación y la necesidad de fortalecer la fe y la familia.
El último día en Colombia, el papa visitará la ciudad amurallada, estará en Cartagena, ciudad caracterizada por ser una de las más turísticas en el país, pero también de las más desiguales. A Cartagena el pontífice llevará un mensaje de “lucha por la igualdad, la defensa de las minorías étnicas, la lucha por pensar definitivamente en la pobreza”, afirmó el cardenal Salazar.
“El papa resaltará todo este aspecto del respeto a la dignidad humana y va a recorrer barrios muy pobres de Cartagena. Se va a meter en la casa de los más miserables de Cartagena”, agregó.
El arzobispo de Bogotá insistió que la visita de Francisco a Colombia y su estadía durante cinco días, es muy importante en este momento de polarización política por los acuerdos de paz que se están instrumentando entre el gobierno y las Farc, así como por el grave problema de corrupción que aqueja desde hace tantos años al país latinoamericano.+
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