Recordaron los 100 años del nacimiento del Siervo de Dios Padre Luis María Etcheverry Boneo
Concelebraron monseñor Alfredo Horacio Zecca, arzobispo titular de Bolsena, y monseñor Ernesto Giobando SJ, obispo auxiliar de Buenos Aires. También concelebró en representación del nuncio apostólico, monseñor Vincenzo Turturro, encargado de negocios interino de la nunciatura.
El arzobispo de Paraná, monseñor Juan Alberto Puiggari, no pudo asistir y concelebrar, como era su deseo, por estar participando con otros obispos de diócesis santafesinas en una misión popular en la diócesis de Rafaela.
Entre los concelebrantes hubo doce sacerdotes allegados a las obras que impulsó el presbítero Etcheverry Boneo, entre ellos estaban monseñor José Bonet Alcón y los presbíteros Francisco Javier Morad, Rómulo Julio Puiggari, Alejandro José Puiggari, Hernán H. Quijano, Diego De Campos, y Eduardo Gabriel Pérez Dal Lago.
El presbítero Alejandro Puiggari, que tuvo a su cargo la homilía, hizo mención de la doctora Lila Blanca Archideo, durante muchos años presidenta de la asociación de vírgenes consagradas “Servidoras”, imposibilitada de asistir por razones de edad y de salud.
Entre los asistentes estuvo Cristina Benedit, actual presidenta de las Servidoras; el doctor Luis Saguier Fonrouge, director general de Culto Católico; el excanciller Adalberto Rodríguez Giavarini y su señora esposa; el embajador Eduardo Mallea, el ingeniero Alejandro Preusche, expresidente de ACDE y su esposa; el doctor Alberto Solanet, expresidente del Consorcio de Abogados Católicos y actualmente presidente de la Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia; y otras numerosas personalidades, simpatizantes y admiradores de la obra del padre Etcheverry Boneo; profesores y alumnos de los colegios Padre Luis María Etcheverry Boneo; San Pablo, de Capital; San Pablo Norte; Santa María del Rosario, de Paraná; exalumnas del colegio Aleluya, de San Luis.
Asistieron también numerosas religiosas de varias congregaciones entre otras, Hijas de la Inmaculada Concepción y Misioneras del Catecismo. Además, miembros de los Colegios Universitarios femeninos y masculinos desde la primeras generaciones a hoy; de la Agrupación Universitaria Misión; del Seminario Catequístico San Pablo; del Centro de Investigaciones en Antropología Filosófica y Cultural (Ciafic).
Homilía
"Hoy estamos reunidos en este lugar tan emblemático, en esta misa presidida por nuestro obispo el cardenal Poli, para dar gracias por una vida, cuidar una herencia espiritual que nos da pertenencia y nos compromete y pedir para todos la conversión que nos permita vivir como él con la mirada fija en el cielo, pero a la vez profundamente comprometidos con el aquí y ahora que el Señor nos regala para nuestra santificación", comenzó diciendo en su homilía el presbítero Alejandro Puiggari.
"Dar gracias al Señor -agregó- por la vida del siervo de Dios padre Luis María Etcheverry Boneo, de este sacerdote cuyos cien años hoy celebramos; de este sacerdote de los que muchos de los presentes tuvimos la gracia de conocer y muchos también de reconocernos hijos y parte de su familia espiritual".
Seguidamente el presbítero Puiggari realizó un rápido pantallazo de la vida del padre Etcheverry Boneo:
"Parece -expresó- que su vida estuviese marcada por tiempos difíciles. Nació en medio de la primera guerra mundial, se ordenó sacerdote en Roma el 12 de abril de 1941, mientras se desarrollaba la Segunda Guerra Mundial...
"Llegado de Roma donde realizó su formación sacerdotal, trabajó en la curia y en parroquias, pero de a poco el Señor lo fue reservando para el acompañamiento y formación de la juventud. Esto lo llevó a la creación de Colegios Universitarios, los colegios San Pablo, (hoy Etcheverry Boneo el de mujeres), la agrupación Misión. Fue director de los Cursos de Cultura Católica desde los cuales impulsó la creación de la Universidad Católica. Intuyó la necesidad de una nueva forma de vida consagrada femenina al servicio de la Iglesia y en 1952 fundó las “Servidoras”.
"Nada era ajeno a su interés sacerdotal y en su personalidad mostraba el armónico cultivo de lo natural y lo sobrenatural. Se prodigó con infatigable paternidad como director espiritual y como maestro, elaborando una rica doctrina teológico-espiritual. Orientó muchas vocaciones sacerdotales y para la vida consagrada, y formó laicos con sólidos principios cristianos, nucleando una amplia familia espiritual.
"Su vida fue breve en duración -murió a los 53 años-, pero fue bendecida por Dios con una fecundidad que no deja hoy todavía de sorprendernos. Por eso, si toda Eucaristía es por sí misma acción de gracias, hoy queremos de un modo especial con el salmista dar gracias al Señor, por todo el bien que nos ha hecho con la persona y la doctrina del querido Padre Luis María".
Palabras del cardenal Poli
Antes de concluir la celebración eucarística, el cardenal Poli pronunció una breve alocución expresando su deseo de adherirse a la acción de gracias "por esta celebración eucarística y por la memoria que estamos celebrando del Siervo de Dios Luis María Etcheverry Boneo".
"De las palabras del padre Alejandro que predicó queda en mi corazón un sentimiento: ¡qué fecundidad apostólica de este sacerdote! No solamente de esta generación, sino de las que pasaron y gracias a Dios de las que vendrán.
"Jesús, en el Evangelio, alabó al Padre porque estas cosas del Reino no se las manifestó a los sabios de este mundo, sino a los pequeños. Y me parece que estamos ante un pequeño del Reino. Y este título de Siervo es ya camino a la santidad, es un primer recibimiento que tiene la Iglesia de este hijo que ha tenido tanta fecundidad, tanta gracia también para él y para dar y ¡vaya si la ha dado!
"La arquidiócesis de Buenos Aires le da gracias a Dios por este hijo, y pido en mi corazón como obispo que esta fecundidad no se interrumpa.
"Decía el padre Alejandro en la predicación que también nos hemos congregado para continuar esta mística, esta identidad también, esta gracia que ha contagiado el padre Luis María.
"El Sínodo de Buenos Aires que se reconoce con 400 años de vida dentro de poco, en el 2020, sabemos que muchos sacerdotes, hijos de la Iglesia, están también en camino a la santidad, el Padre Luis María es uno de ellos.
"Que el Señor nos conceda esta gracia de tenerlo en nuestros altares; hoy pedimos especialmente, yo lo encomendé en la Eucaristía especialmente para que el Señor nos muestre su gracia, la Iglesia nos conceda esta gran alegría, la misma alegría que tenemos ahora en forma potenciada.
"Que el Señor nos conceda en este camino al Cielo que podamos ser testigos también de su santidad".
Misa en Roma
El lunes 18 de septiembre a las 19, hora de Roma, en la Iglesia Argentina en Roma hubo también una misa de acción de gracias y en memoria del padre Etcheverry Boneo. La celebración fue presidida por el presbítero Daniel Alfredo Forconesi, vicerrector de la Iglesia Argentina. Asistieron el embajador ante la Santa Sede Rogelio Pfirter y su esposa, la cónsul general en Italia Lucy Dougherty de Sánchez, y personas vinculadas al Centro de Estudios Santa María ad Nives, de las Servidoras en Roma.+
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