Iquique, zona donde se registra mucha inmigración es tierra de sueños, que ha sabido albergar a gente de distintos pueblos y culturas. Gente que ha tenido que dejar a los suyos, marcharse, recordó Francisco.
Es tierra de sueños, pero busquemos que también siga siendo tierra de hospitalidad. Hospitalidad festiva, porque sabemos bien que no hay alegrpia cristiana cuando se cierran puertas; no hay alegría cristiana cuando se les hace sentir a los demás que sobran o que entre nosotros no tienen lugar, pidió.
Estemos atentos a los que se aprovechan de la irregularidad de muchos migrantes porque no conocen el idioma o no tienen sus papeles en regla. Estemos atentos a la falta de techo, tierra y trabajo de tantas familias. Y como María digamos: No tienen vino Señor, agregó e invitó, como María, a estar atentos en nuestras plazas y poblados, y reconcoer aquellos que tienen la vida aguada, que han perdido o les han robado- las razones para celebrar o están tristes de corazón.
Aprovechemos también a aprender y a dejarnos impregnar por los valores, la sabiduría y la fe que los inmigrantes traen consigo. Sin cerrarnos a esas «tinajas» llenas de sabiduría e historia que traen quienes siguen arribando a estas tierras. No nos privemos de todo lo bueno que tienen para aportar, aseveró.
Luego de su homilía, Francisco coronó la imagen de la Virgen del Carmen de la Tirana, imagen de gran devoción popular en todo el norte de Chile. Las ofrendas fueron llevadas por pescadores, mineros, andinos, cuasimodistas y migrantes.
Al término de la misa el obispo de Iquique, monseñor Guillermo Vera Soto, agradeció al Papa por su visita y le hizo entrega de un báculo y una cruz de sal. Nos emociona, Santo Padre, que haya puesto sus ojos en este lugar de desierto y mar, donde lo superfluo no existe porque la armonía del Creador triunfa, dijo el obispo. Chile ha podido rezar con usted, Chile se ha sentido querdo. Puedo asegurarle también, que usted tampoco esta solo. El cariño y las plegarias de los chilenos le acompañarán siempre y ya estamos pavimentando con nuestras oraciones su visita a Perú, aseguró.
Francisco agradeció la presencia de los argentinos en Chile
Al terminar su encuentro en Iquique, antes de partir para Perú, el papa Francisco, conmovido por la presencia de tantos argentinos durante su visita en Chile, les agradeció especialmente.
Quiero agradecer la presencia de tantos peregrinos de los pueblos hermanos de Bolivia y del Perú y, no se pongan celosos, especialmente de los argentinos, manifestó. Gracias a los argentinos que me acompañaron también en Santiago y en Temuco, ¡muchas gracias!, repitió emocionado.+
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