Mons. Frassia llama a confiar en lo absoluto y eterno del hombre

Mons. Frassia llama a confiar en lo absoluto y eterno del hombre

Mons. Rubén Frassia, obispo de Avellaneda-Lanús.

Avellaneda (Buenos Aires) (AICA): Al comentar el Evangelio dominical, el obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Frassia, convocó a los fieles a movilizarse y comprometerse, porque si bien Cristo no borra el dolor y el sufrimiento de la vida humana, le da sentido y llama a sus seguidores a vivir como personas colmadas de esperanza.

Al comentar el Evangelio dominical, el obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Frassia, convocó a los fieles a movilizarse y comprometerse, porque si bien Cristo no borra el dolor y el sufrimiento de la vida humana, le da sentido y llama a sus seguidores a vivir como personas colmadas de esperanza.

Monseñor Frassia hizo esta afirmación al comentar la escena evangélica de la resucitación de la hija de Jairo, narrada en el Evangelio según San Marcos. Al respecto expresó: “Dios nos ha creado a todos para la existencia, para nuestra vida. Por eso, Dios no creó al hombre para que cayera en la nada; tampoco Dios creó la muerte y no se goza en la destrucción de los vivos. La muerte ha entrado por la envidia del maligno, por el pecado del hombre”.

“Dios Padre envió a su Hijo para liberarnos del peso tremendo y casi absoluto del poder de la muerte”, resaltó el obispo. “Con su muerte y resurrección –añadió- Cristo venció al pecado y venció a la misma muerte. Es importante saber que Él abrió las puertas para ir al cielo; abrió las puertas para que nos encontráramos en un abrazo con el Padre. Nos dio la inmortalidad, la divinidad, nos participó su amor, nos dio lo eterno, que ya comienza aquí”.

El obispo invitó a tener confianza de lo absoluto y de lo eterno en el hombre para no permanecer de brazos cruzados. Sostuvo que esta certeza “nos tiene que movilizar y comprometer para que podamos transformar esta realidad en una vida más digna, plena, responsable y sana”.

“Tenemos que salir de tantas enfermedades que a veces aplastan y producen el deterioro de la vida humana. En la Oración por la Patria le pedimos a la Virgen que nos ayude a levantarnos y caminar para que nuestra patria sea realmente una patria de verdaderos hermanos, para que vivamos una vida más plena”, manifestó el prelado al concluir su reflexión.+

Texto completo de la alocución

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