Después de los atentados suicidas del pasado mes de marzo, cuando dos kamikazes se inmolaron frente a dos iglesias en Youhanabad, una católica y otra protestante, los residentes viven en constante temor y con estos mensajes generaron una nueva ola de pánico. Nusrat Bibi, profesor de Youhanabad, señala que “este año, el miedo y la incertidumbre reinan en las calles de Youhanabad, nadie se siente seguro.
Difícilmente se verán los típicos puestos de mercado o las decoraciones de Navidad. Nos sentimos como si alguien hubiese robado nuestra felicidad”. Aunque la presencia de la policía aumentó, las iglesias se dotaron de su propio cuerpo de vigilancia. Pero su “arma especial es la oración”, señala la Ong cristiana paquistaní “Life For All”, invitando a la sociedad civil a participar en una campaña de “oración por la paz” en vista de la Navidad.
Xavier Williams, presidente de la LFA, declaró a la Agencia Fides “desde hace años, Pakistán lucha contra el terrorismo que azota las calles, plazas, escuelas, mezquitas e iglesias. Vamos a seguir orando sin cesar a Dios por el don de la paz, invocando la fuerza para superar los momentos difíciles como este. El terrorismo es un reto que nos afecta a todos. La Navidad es un mensaje de alegría, esperanza y victoria sobre la muerte”.
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