“Los grandes valores de la tradición africana, la sabiduría y la verdad de la Palabra de Dios, y el generoso idealismo de su juventud, los guíen en su esfuerzo por construir una sociedad que sea cada vez más justa, inclusiva y respetuosa de la dignidad humana”, subrayó al presidir una misa por la evangelización de los pueblos en el Campus de la Universidad de Nairobi.
Ante unas 300.000 personas que según la policía local participaron de la celebración eucarística, pese a la lluvia en la capital keniata, el pontífice argentino sostuvo que "estamos llamados a resistir prácticas que fomenten la arrogancia en los hombres, que hieran o menosprecien a las mujeres y que amenacen la vida de los inocente no nacidos".
“Las familias cristianas tienen esta misión especial: irradiar el amor de Dios y difundir las aguas vivificantes de su Espíritu. Esto tiene hoy una importancia especial, cuando vemos el avance de nuevos desiertos creados por la cultura del materialismo y de la indiferencia hacia los demás”, agregó.
Tras participar de un encuentro ecuménico e interreligioso, el Santo Padre se dirigió al campus universitario, donde fue recibido con cantos y danzas tradicionales keniatas.
El Papa aseguró que la sociedad keniata “ha sido abundantemente bendecida con una sólida vida familiar, con un profundo respeto por la sabiduría de los ancianos y con un gran amor por los niños” y subrayó: “La salud de cualquier sociedad depende de la salud de sus familias”.
Francisco se despidió saludando en suajili: “¡Mungu awabariki! (Que Dios los bendiga) y ¡Mungu abariki Kenya! (Que Dios bendiga a Kenia)”.+
Texto completo
This entry passed through the Full-Text RSS service - if this is your content and you're reading it on someone else's site, please read the FAQ at fivefilters.org/content-only/faq.php#publishers.
Publicar un comentario