“Debemos consolidarnos en caminos hacia una verdadera democracia”, insistió el prelado. “Es lamentable escuchar que algunos que temen perder beneficios o la concreción de una propia ideología insultan al que piensa distinto, a los que piensan votar distinto a él. Así no se construye la democracia, ni así se construye un país”, expresó monseñor Olivera.
El obispo cruzdelejeño convocó a “consolidar caminos de fraternidad” y actualizar “la cultura del encuentro y el respeto” para lograr una convivencia entre quienes piensan diferente.
Sobre las expresiones de Hebe de Bonafini, el obispo reflexionó: “Lo más grave del país por herencia que estamos recibiendo es la impunidad. No podemos seguir tolerando que cualquiera agravie a otro y todo siga igual, eso no ayuda a la república y no ayuda a consolidar la amistad social”.
“Quizás el mayor temor de estos tiempos es que vivimos en un país enfrentado, tenemos que recuperar la fraternidad, tenemos que recuperar la amistad social, donde todos podamos libremente expresar lo que pensamos sin agraviar a otros”, observó.
“Este no es este el camino que queremos, más allá de cualquier mirada política. Queremos una mirada humana, una mirada con sentido común. Queremos pedir por favor que no sean los caminos del futuro: el agravio, el descrédito, el insulto; pedir por favor cordura y respeto para los judíos, para los católicos, para los musulmanes, para los que no creen, para todos, porque ésta debe ser una patria para todos”, agregó.
Monseñor Olivera propuso rezar por la patria y llamó a construir un país fraterno, donde el diálogo y el respeto sean las bases de esta Argentina que todos queremos. “Quiera Dios que esto se vaya manifestando en nuestro tiempo. Dios ayude a nuestra patria”, concluyó.+
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