Luego de escuchar el pedido de los obispos de Arauca y Garzón para que sean incluidos en el número de los beatos, el Papa Francisco pronunció la siguiente fórmula de beatificación:
“Nos, acogiendo el deseo de nuestros hermanos Jaime Muñoz Pedroza, Obispo de Arauca, y Fabio Duque Jaramillo OFM, obispo de Garzón, así como de otros muchos hermanos en el episcopado y de numerosos fieles, después de haber escuchado el parecer de la Congregación de las Causas de los Santos, con nuestra autoridad apostólica declaramos que los venerables Siervos de Dios, Jesús Emilio Jaramillo Monsalve, del Instituto de Misiones Extranjeras de Yarumal, obispo de Arauca, y Pedro María Ramírez Ramos, sacerdote diocesano, párroco de Armero, mártires, que, como pastores según el corazón de Cristo y coherentes testigos del Evangelio, derramaron la sangre por amor a la grey que les fue confiada, de ahora en adelante sean llamados beatos, y se podrá celebrar su fiesta cada año, en los lugares y en el modo establecido por el Derecho, el 3 y el 24 de octubre respectivamente. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. C. Amén”.
Jaramillo, obispo de Arauca, una región fronteriza con Venezuela, fue asesinado por la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) el 2 de octubre de 1989 cuando se encontraba en una zona rural de la localidad de Arauquita.
A su vez, Ramírez, murió asesinado en la localidad de Armero, en el centro del país, el 10 de abril de 1948 durante la revuelta popular que siguió al asesinato en Bogotá el día anterior del caudillo liberal Jorge Eliecer Gaitán.
El pasado 7 de julio el Santo Padre aprobó el Decreto que reconocía el martirio de los presbíteros, por considerar que sus asesinatos fueron por odio a la fe. +
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