Mons. Martínez: “La espiritualidad cristiana necesita que la fe esté encarnada en la vida”
“Seguramente son muchas las causas que provocan las rupturas entre la fe y la vida; entre la fe y la ciencia, entre la fe y la cultura. Lamentablemente esto trae problemas a la acción evangelizadora de la Iglesia. Algunas de esas causas las encontramos en planteos erróneos de espiritualidad”, precisó.
“En efecto, no son pocos los cristianos que encierran la dimensión religiosa en la sola práctica de actos de piedad, y en la vida diaria se sienten liberados a obrar de cualquier manera, sin ningún criterio ético. Desde ya que esto es una visión errónea e incluso ritualista y pagana de la religiosidad”, agregó.
El prelado consideró que “los cristianos debemos saber que la espiritualidad necesita de la piedad, de la oración personal, comunitaria y de la vida sacramental. Todo esto debe llevarnos a captar cuál es la voluntad de Dios y ponerla en práctica en nuestro obrar cotidiano”.
“La espiritualidad cristiana necesita que la fe esté ‘encarnada’ en la vida”, sostuvo citando al apóstol Santiago, e insistió en afirmar que “es fundamental la comprensión de este desafío por parte del laicado que es la gran mayoría del pueblo de Dios”.
“Evangelizar la cultura implicará, a todos los bautizados, poner en práctica la voluntad de Dios en la familia, en el trabajo, en la política, en la escuela y en la chacra”, subrayó.
Monseñor Martínez lamentó que “algunos por ignorancia o por razones ideológicas han creído que la fe y la religiosidad deben quedar encerradas en los templos”.
“Es cierto que una sana concepción cristiana de la espiritualidad valoriza al templo, en donde alimentamos nuestra fe, pero esa fe debe salir y estar en todos los ambientes y sectores donde los hombres y mujeres vivimos. Es importante que podamos evaluar y cuestionarnos sobre cómo vivimos nuestra vocación cristiana”, concluyó.+
Publicar un comentario