“Caminar en comunión para anunciar a todos la alegría del Evangelio” fue “la conclusión, el objetivo y la propuesta” a la que arribaron los miembros del clero diocesano luego de cuatro días de reflexión y actividad compartida.
El prelado detalló el significado de cada elemento de la conclusión: “Caminar”, hace referencia al urgente llamado “a ponernos en movimiento en respuesta renovada a la misión que Dios nos ha encomendado”. Al respecto, animó a avanzar siempre con esperanza.
“En comunión”, significa que “esta misión no la podemos llevar a cabo individualmente o en soledad; sino conjuntamente”, trabajando unidos: “Los sacerdotes trabajando estrechamente con los religiosos y religiosas, y con los fieles laicos” porque “¡La unión hace la fuerza!”.
“Para anunciar a todos”, tal como insiste el papa Francisco, se trata de “llegar a las periferias geográficas y existenciales de la humanidad”. Monseñor Torrado Mosconi llamó al ardor y la pasión “por llevar a Dios a todos cuantos no lo conocen, lo necesitan, o se han alejado” y animó a “¡Que no nos paralice ni el miedo ni la comodidad!”.
“La alegría del Evangelio”, supone responder a la invitación del Papa “a que esta etapa de la evangelización esté marcada por la alegría. Esa alegría que viene del Evangelio y que llena de sentido nuestra vida”. El prelado destacó que “en estos tiempos donde tantos andan por la vida buscando a tientas un sentido, nosotros queremos anunciarles a Jesucristo, que es aquel que viene a llenar y superar todas las expectativas humanas de vida, y vida plena”.
“Compartiendo en diálogo franco nuestras apreciaciones sobre la realidad de las parroquias y tratando de discernir a la luz de la fe en clima de oración, nos hemos propuesto para poder lograrlo tres objetivos pastorales concretos que iremos trabajando conjuntamente con ustedes en cada una de las comunidades que conforman esta Iglesia particular”, señaló el obispo. Por un lado, “fortalecer y suscitar los vínculos de comunión entre los agentes de pastoral para hacer creíble el anuncio”; en segundo lugar, “favorecer y crear espacios de formación para responder a los nuevos desafíos”, y por último “impulsar con audacia y creatividad nuevas formas de anuncio para salir al encuentro de las periferias y nuevas realidades culturales”.
“Queremos ofrecerles estos objetivos pastorales para que sean orados, reflexionados y, en la medida que sea necesario, corregidos y enriquecidos por toda la comunidad diocesana.
Como lo venimos haciendo desde hace 60 años, sigamos peregrinando fraternalmente en la ‘dulce y confortadora alegría de evangelizar’”, concluyó.+
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