Monseñor Martínez reflexionó sobre el papel de la oración en la vida cristiana

Monseñor Martínez reflexionó sobre el papel de la oración en la vida cristiana

Posadas (Misiones) (AICA): Monseñor Juan Rubén Martínez, obispo de Posadas, reflexionó sobre el Evangelio que relata el encuentro de Jesús con Marta y María, y pidió oración por los peregrinos de su diócesis que participarán de la Jornada Mundial de la Juventud 2016. “Es bueno que no nos olvidemos de una regla invariable: tener un rato para acentuar lo importante o sea para orar, nos permitirá resolver con mayor eficacia tantas cosas que nos inquietan y que son urgentes”, destacó, y detalló las claves para ser hombres y mujeres de oración: la perseverancia de la oración diaria, constante y la humildad de sabernos necesitados de Dios.
Monseñor Juan Rubén Martínez, obispo de Posadas, reflexionó sobre el Evangelio que relata el encuentro de Jesús con Marta y María, y pidió oración por los peregrinos de su diócesis que participarán de la Jornada Mundial de la Juventud 2016.

En su mensaje dominical, el prelado afirmó que los cristianos “necesitamos revisar el lugar que le damos a la oración en nuestra vida”, y pidió oración por los casi cien peregrinos de su diócesis que viajarán a Cracovia para asistir a la Jornada Mundial de la Juventud, que contará con la presencia del papa Francisco.

El obispo expresó la intención de que los peregrinos, animados por el Espíritu Santo, “sean fortalecidos y renovados en la fe y puedan convertirse en evangelizadores de otros jóvenes, sobre todo de aquellos que están más necesitados y desprotegidos.”

Además, se refirió a la necesidad de profundidad y compromiso en la oración: “Es preciso aprender a orar, como aprendiendo de nuevo este arte de los labios mismos del Divino Maestro, como los primeros discípulos”, detalló.

El obispo destacó el ejemplo de María como “un modelo que nos ayuda a valorizar la escucha de la Palabra del Señor y la necesidad de la oración”, sobre todo en la vida moderna que “nos lleva a estar inquietos y agitados por muchas cosas”.

“Es bueno que no nos olvidemos de una regla invariable: tener un rato para acentuar lo importante o sea para orar, nos permitirá resolver con mayor eficacia tantas cosas que nos inquietan y que son urgentes”, agregó, y señaló las claves para ser hombres y mujeres de oración: la perseverancia de la oración diaria, constante y la humildad de sabernos necesitados de Dios.+

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