Mons. Santiago explicó los objetivos del servicio para la preparación remota para el matrimonio
Este servicio, explicó en una carta pastoral, se inspiró en la insistencia del Sínodo Extraordinario sobre la Familia, que junto con el Sínodo Ordinario darían lugar al documento postsinodal redactado por el papa Francisco, llamado Amoris laetitia (La alegría del amor), acerca de la necesidad de una preparación remota para el matrimonio.
El prelado detalló que “madurar el amor” y “evitar el fracaso matrimonial”, son alguna de las razones que llevan a la necesidad de una preparación remota para el matrimonio.
Asimismo, justificó que hay que incluir en esta preparación remota a las parejas “de hecho” unidas por primera vez, a fin de darles “elementos humanos y cristianos, sin presionarlos, para que madurando el amor, decidan unirse en matrimonio o descubran su incompatibilidad para una unión estable”.
“Hay que tener en cuenta que en la cultura actual hay una precariedad en los vínculos, debido, entre otras cosas, al temor del compromiso definitivo. Por eso la preparación remota, a través de una transmisión testimonial y doctrinal de la espiritualidad del matrimonio, realizada por matrimonios sacramentados, debe ir aportándole confianza y consistencia a la relación incipiente de pareja”, subrayó.
Monseñor Santiago señaló también la necesidad de un “catecumenado” para vivir el matrimonio sacramento, de pasar de una pastoral de “espera” a una pastoral misionera y puntualizó que el servicio M.a.R.IA “no es un movimiento, es un grupo de matrimonios cristianos que no se unen y organizan bajo un carisma determinado, simplemente quieren prestar un servicio a la vocación matrimonial y familiar”.
Indicó, además, que está el servicio se le ofrece a:
• Novios que con una cierta solidez en la relación, quieren prepararse para madurar su amor, conocer si hay incompatibilidades en su relación de pareja, y tienen la intención de celebrar en el futuro el sacramento del matrimonio.
• Parejas de hecho cuyos integrantes no hayan contraído matrimonio en una unión anterior, preferentemente parejas jóvenes.
• Matrimonios jóvenes, es decir, para aquellos que habiendo celebrado el Sacramento del Matrimonio de manera reciente, quieren formarse para enriquecer su vida matrimonial y familiar.
Además, de señalar que el servicio está animados por matrimonios afianzados en su vida cristiana, que practican la fe y están comprometidos con la pastoral eclesial, que no se unen y organizan bajo un carisma determinado, sino que prestan un servicio a la vocación matrimonial y familiar.
Los encuentros que proponen son mensuales, a modo de convivencias, y están destinados a reflexionar sobre experiencias fundamentales de la vida de pareja: el diálogo, el perdón y la reconciliación, la oración y los medios espirituales de crecimiento cristiano, la sexualidad, la opción por la vida y la educación de los hijos, etc.
Sanar heridas profundas, la unión, la nueva siembra, secretos para la felicidad, la grandeza del perdón, la toma de decisiones, los hijos, serán algunas de las temáticas se abordarán en los diferentes encuentros, de un día y medio de duración cada uno.
“Esperando que como Diócesis podamos aprovechar este servicio, que estará a disposición de quién lo necesite, también fuera de nuestra diócesis, ya que los matrimonios animadores y los sacerdotes que los acompañan, con un espíritu misionero, están dispuestos a ir donde los llamen para compartir esta iniciativa, los saludo cordialmente y pido a la Virgen de Itatí que les alcance de Dios una abundante bendición”, concluyó el obispo.+
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