Mons. Buenanueva: “El pueblo desea superar grietas y enfrentamientos patológicos”
“Si tuviera que usar una palabra para expresar lo que yo siento y recojo que muchos sentimos ante este proceso electoral, otra vez un año irracional en el calendario electoral, eso tiene que cambiar, pero la palabra que elijo es ‘desasosiego’”, definió.
“Nuevamente emerge el profundo desorden de la vida argentina, un país, una sociedad, un pueblo que no logra encontrar rumbo, el emergente es la crisis económica una vez más”, agregó.
El prelado recordó que el analista político Natalio Botana manifiesta que las crisis en el país están encadenadas, para expresar: “Es muy fácil atribuirle a este gobierno la crisis, obviamente que tiene sus graves responsabilidades, pero no es saber resolver el desatino que viene de larga data”.
“Las consecuencias son graves, una pobreza estructural que ronda el 25%, y que en cada una de estas crisis, significa que nuevos pobres ingresan a esa pobreza estructural donde los que primero sufren son los niños”, advirtió.
“En esto, creo que hay una responsabilidad muy grave de la dirigencia que parece no caer en la cuenta, y eso lo digo y es absolutamente personal, para mí el acto eleccionario, entrar al cuarto oscuro es un juego de azar, porque ningún candidato ha explicitado qué van a hacer con nuestra economía, entonces qué vamos a hacer poner un voto diciendo ojalá que esta vez acierten”, opinó.
En otro momento de la entrevista, el obispo consideró que “los argentinos no encontramos el punto justo de convivencia que nos permita acuerdos de fondo” y sostuvo: “Aún reconociendo que tenemos proyectos de país distinto, las dos coaliciones que compiten hoy, el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, expresan modelos de país distintos y legítimos”.
En este sentido, monseñor Buenanueva indicó que “hay católicos en uno y otro, por eso la Iglesia debe mantener una rigurosa neutralidad” y se preguntó: “Cómo encontrar ese punto de convivencia que nos permita decir qué vamos a hacer con la pobreza, con el déficit, con el mundo del trabajo, la interacción entre el campo y la industria, con la educación. Me parece que en esto tenemos que trabajar muchísimo más”.
“Escuchaba a un dirigente sindical que decía y en lo que acuerdo es en que el momento de hablar de un gran acuerdo o un diálogo no es antes de las elecciones, sino el que gane -sea quien sea- realmente tiene que convocar a las personas para lograr estos consensos, aquí siento un desasosiego muy grande porque la campaña ha sido pobrísima”, aseveró.
“Así como a la dirigencia nos tienen que llamar la atención, se nota en el pueblo un deseo de superar la grieta o estas formas patológicas de enfrentamientos, que tienen los doscientos años de nuestra historia. Por eso tenemos que pensar cómo convivimos los argentinos”, concluyó.+
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