Pesar del Papa por el ataque a la iglesia de Nigeria que dejó un saldo de 12 muertos
Al menos doce personas murieron este domingo 6 de agosto, y otras 18 resultaron heridas como consecuencia del ataque de un grupo de hombres armados que abrieron fuego contra el centenar de fieles que asistían a misa en la iglesia San Felipe de la localidad de Ozubulu, en el sureste de Nigeria.
El papa Francisco envió un telegrama, por medio de su Secretario de Estado, cardenal Pietro Parolin, al obispo de Nnewi, monseñor Hilary Paul Odili Okeke, en que expresa su pesar y “extiende sus más sentidas condolencias ya todos los fieles de la diócesis de Nnewi, en particular las familias de los difuntos Y todos los afectados por esta tragedia”.
“Su Santidad, concluye el telegrama, invoca bendiciones divinas de consolación y fortaleza para toda la diócesis”.
Según los medios locales, algunos testigos relataron que en un primer momento dispararon contra un hombre que se encontraba en la iglesia y, posteriormente, empezaron a disparar indiscriminadamente contra el resto de personas.
El estado de Anambra, donde se ubica Ozubulu, se encuentra en el sureste del país, donde no suele actuar el grupo terrorista Boko Haram, cuyo feudo está en la zona norte.
Por eso, la policía aseguró que investigará estos hechos para esclarecer el motivo y detener a los atacantes. El ejército nigeriano logró en los últimos meses recuperar buena parte del territorio conquistado por Boko Haram en el noreste del país, donde los yihadistas aspiran a establecer un estado regido por la sharia o ley islámica. Sin embargo, el grupo terrorista ha recurrido de forma creciente a los atentados suicidas contra civiles.
Se calcula que más de 17 mil personas han muerto, la mayoría civiles, y unos 2.5 millones han abandonado sus hogares a consecuencia de la violenta lucha del grupo extremista tratando de imponer un Estado islamista en el Norte de Nigeria.+
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