Mons. Araya pidió a Brochero caminos pastorales verdaderamente brocherianos
“Él se nutría de ese amor en movimiento en la celebración diaria de la misa, que rebalsaba el espacio y el momento de la acción litúrgica. Porque la Eucaristía, decía el padre Brochero, es el fruto del amor de Dios que rebalsa y explota”, recordó en la homilía.
“Que Brochero nos saque por sus caminos, que nuestros caminos pastorales sean verdaderamente brocherianos”, pidió, y agregó: “Pidamos a Dios ser baqueanos por los caminos, con heridos a las orillas. Saber andar por los caminos de los enfermos, los que viven en zonas distantes y los jóvenes”.
El prelado alentó a “abrir caminos” que lleven hasta los caminos por donde los jóvenes “andan buscando vida”, sobre todo aquellos que se alejaron de Cristo y de la Iglesia.
En este sentido, monseñor Araya propuso que para el próximo aniversario de la canonización del Cura Brochero se realice una peregrinación juvenil a pie a este santuario dedicado al santo.
“Que los jóvenes puedan venir con sus preguntas y sus certezas, con sus quejas, con sus dolores y tristezas, con sus miedos y sus sueños. Con la confianza y la esperanza puesta en Dios. Y que en la casa de Brochero los podamos abrazar, sin interrogatorios, sin condenas, sin escandalizarnos; como se recibe a los hijos, a los hermanos; como se ha de querer a las personas, más allá de sus ideas y de sus opciones”, puntualizó.
“Que el Santo Cura Brochero desde el Cielo nos siga ayudando y recibamos ‘el milagro’ de sanar nuestras heridas. Que el santuario sea un ‘hospital de campaña’, no una clínica privada. Una casa, un hogar donde se pueda una y otra vez empezar de nuevo”, concluyó.+
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