El obispo de Posadas consideró necesario madurar en la fe también en la cuestión social
“Difícilmente podamos asumir un camino de maduración en la fe si no revisamos nuestras actitudes de vida ligadas a la justicia y la caridad, y si no nos planteamos algunos temas como nos señala ‘Navega Mar Adentro’ sobre el escándalo de la pobreza y la exclusión social”, advirtió.
“En dicho documento los obispos argentinos nos hemos propuesto la necesidad de acentuar en la vida cristiana una mayor formación en la moral social y en la doctrina social de la Iglesia, porque percibimos la ruptura que se da entre la fe y la vida, entre la fe y los criterios. Esto hace que los valores no estén suficientemente presentes en nuestra cultura”, sostuvo.
El prelado consideró que “basta recordar cómo muchos dirigentes políticos, comunicadores sociales y otros que se denominan cristianos no dudaron en someter a la dictadura del relativismo una institución clave para la sociedad como es el matrimonio y la familia, y el derecho de los niños a la crianza de un papá y una mamá, o por lo menos de una figura masculina y femenina”.
“Esta ruptura entre la fe, la vida y los criterios, también se da en el ámbito de la cuestión social. En Navega Mar Adentro señalamos: ‘En un país constituido mayoritariamente por bautizados, resulta escandaloso el desconocimiento y, por lo mismo, la falta de vigencia de la Doctrina Social de la Iglesia”, citó.
“Esta ignorancia e indiferencia permiten que no pocos hayan disociado la fe del modo de conducirse cristianamente frente a los bienes materiales y a los contratos sociales de justicia y solidaridad. La labor educativa de la Iglesia no pudo hacer surgir una Patria más justa porque no ha logrado que los valores evangélicos se traduzcan en compromisos cotidianos”, completó.
Por último, monseñor Martínez afirmó que “es importante que hagamos una real evaluación y autocrítica en orden a buscar caminos de conversión a Jesucristo, el Señor y a su propuesta”.+
Texto completo
Publicar un comentario