Endepa exhortó a deponer actitudes violentas y represión a comunidades indígenas
En un mensaje final titulado “Lo que hemos visto y oído. Compartiendo el camino”, los participantes advirtieron que “la Madre Tierra, casa común de todos nosotros, sigue siendo saqueada, devastada y vejada impunemente”, y que “son numerosos los conflictos por los territorios donde una vez más constatamos que intereses poderosos, de empresas extractivas de latifundios en manos extranjeras y locales, de emprendimientos urbanísticos, entre otros, son protegidos por los gobiernos nacional y provinciales”.
Ante esta situación, Endepa llamó a los gobiernos para que abandonen “actitudes de violencia y represión frente a comunidades indígenas” y se involucren “en la superación positiva de los conflictos en territorios indígenas, en un marco de respeto por la verdad y las normas jurídicas vigentes, incluyendo a los indígenas como parte esencial de la solución mediante medidas no violentas que propicien el diálogo, la amistad social y la paz”.
Texto del comunicado
1. Nos hemos reunido en nuestro primer Encuentro anual de Coordinación Nacional, agentes de pastoral de Endepa, que hacemos camino articulados y vivimos codo a codo con los Pueblos Indígenas en Argentina. Tenemos la inmensa alegría de estar con ellos, en actitud respetuosa y fraterna de escucha, de aprendizaje, de diálogo intercultural, de acompañamiento en la lucha por sus derechos.
2. Vemos que la Madre Tierra, casa común de todos nosotros, sigue siendo saqueada, devastada y vejada impunemente. Son numerosos los conflictos por los territorios donde una vez más constatamos que intereses poderosos, de empresas extractivas de latifundios en manos extranjeras y locales, de emprendimientos urbanísticos, entre otros, son protegidos por los gobiernos nacional y provinciales.
3. Al mismo tiempo nos preocupa e inquieta ver, la dureza con que son reprimidos los que defienden su derecho a la tierra y a vivir en un ambiente sano. Muchos de los territorios y comunidades indígenas del país se encuentran en áreas de conflicto y de conflictos importantes: de tierras, mega minería, petróleo, bosque, agua, contaminación de los ríos, etc.
4. Lo que ha vivido recientemente el Pueblo Mapuche en Cushamen (Chubut) y Guaraní en Embarcación (Salta) son graves acontecimientos que nos han mostrado las diferentes reacciones de la sociedad y de los gobiernos. Nos asombra la dura represión a los hermanos Mapuches del Lof de Cushamen. Como Equipo hemos contribuido para aportar al diálogo.
Los indígenas se hicieron visibles para el país por estos hechos de represión.
Vemos que resulta necesario repensar ciertos términos que son muy difundidos por los medios de comunicación y no siempre reflexionados por todos.
5. Los pueblos indígenas en Argentina han sufrido un despojo histórico que continua y se consolida con mayor violencia cada vez que los gobiernos ignoran su relación vital y espiritual con la tierra y sus reclamos históricos. Frente a ello, con distintas formas y estrategias de lucha, resisten hace más de cinco siglos su exterminio en defensa de su tierra, su cultura.
6. Nos preocupa que el conjunto de medidas que toman quienes luchan por sus derechos, se los presente como si fuera el conflicto en sí, sin considerar las verdaderas causas que lo originan.
Creemos que el origen se vincula al despojo histórico, a la falta de espacio para desarrollar la vida comunitaria y de respeto por las formas propias de ver el desarrollo, a la prepotencia de los intereses económicos y connivencia entre sectores de poder, a la falta a la falta de consulta que ignora sus prioridades y aspiraciones, a la negación de la identidad indígena, al incumplimiento de las leyes, a la criminalización de quienes lideran reclamos legítimos, entre otros.
7. Como consecuencia, y para legitimar estas acciones, se exponen en grandes medios masivos de comunicación acusaciones falaces e infundadas contra los pueblos indígenas, denotando una concepción de fondo racista y discriminatorio.
8. Por todo ello, hacemos un llamado, en especial a los gobiernos, a abandonar actitudes de violencia y represión frente a comunidades indígenas, e involucrarse en la superación positiva de los conflictos en territorios indígenas, en un marco de respeto por la Verdad y las normas jurídicas vigentes, incluyendo a los indígenas como parte esencial de la solución mediante medidas no violentas que propicien el diálogo, la amistad social y la paz.+
Publicar un comentario