El Papa agradeció los 90 años de vida del cardenal Sodano y su servicio a la Iglesia
La Eucaristía, celebrada en latín, contó con la presencia de muchos cardenales, miembros de la Curia Romana, y los que sucedieron en la Secretaría de Estado al cardenal Sodano, los purpurados Tarcisio Bertone, Giovanni Battista Re y el cardenal Pietro Parolin.
Durante la homilía el cardenal Sodano dio gracias al Señor por los dones recibidos, y de modo especial, por la “vocación sacerdotal”, con diversas referencias a San Ambrosio, a quien la Iglesia recuerda en su memoria litúrgica. “No bastará una eternidad para dar gracias al Señor por haber sido su ministro”, expresó el purpurado.
Al final de la misa, el papa Francisco le dirigió unas palabras en las que le agradeció su testimonio y lo mucho que hizo por la Iglesia.
Hay que hacer memoria de lo que Dios “ha hecho por nosotros”: “es una desgracia” perderla – dijo el Pontífice – a la vez que aludió asimismo a la memoria “de nuestra pequeñez, de nuestras equivocaciones y también de los pecados”.
La memoria nos da la fuerza para “ir hacia otra decena” y lo que el Cardenal ha hecho para prepararse a esta fiesta, nos lo ofrece a nosotros como un don: “El don de un testimonio de vida que hace bien a todos”.
El Señor –prosiguió diciendo el Papa– conduce a cada uno por un camino diverso, pero siempre de la mano. En fin, el deseo de que el testimonio “en la disciplina eclesial” ofrecida por el cardenal Sodano “nos ayude a ir adelante en nuestra vida”.
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