Mons. Araya llamó al nuevo monje a “no anteponer nada al amor de Cristo”
En la fiesta de San Antonio Abad, el Monasterio de la Santa Cruz y de la Madre de Dios recibió con alegría la profesión de los primeros votos del nuevo monje, de 21 años, quien desde ahora se llamará Alejandro de Dios y es el noveno integrante de la comunidad que se encuentra en la diócesis desde hace 15 años.
“La vida monástica nos recuerda de modo sencillo lo esencial de la vida bautismal: buscar a Dios. Buscarlo en la revelación hecha por Cristo; poniendo los ojos en lo invisible y eterno; en la espera de la manifestación gloriosa del Salvador. Gracias por recordarnos lo esencial, lo primero en la vida de todo bautizado”, expresó el obispo en su homilía.
Dirigiéndose a Alejandro de Dios, recordó: “Se te llama a buscar a Cristo y no anteponer nada a su amor, como afirma una larga tradición en la Iglesia hecha consigna especial por San Benito. Dejarlo todo, pero para seguir a Cristo”.
Además, monseñor Araya le pidió al joven monje que “permanezca unido en el amor fraterno, acepte con entereza las manifestaciones de la voluntad de Dios, que sea moderado, sencillo y alegre".
“Que la Madre de Dios, la Virgen, que supo no anteponer nada a Cristo, te ayude a ser fiel en la Iglesia de este tiempo, incomprendida, pecadora, capaz de celebrar la gloria y la presencia de Dios; fiel en este lugar, en esta diócesis que te abraza y te confirma como hijo en esta vocación monástica”, deseó.
Luego de la celebración, los presentes compartieron un almuerzo fraterno en el monasterio. El obispo asistió junto con los seminaristas y algunos sacerdotes diocesanos.
Los Monjes de la Santa Cruz y de la Madre de Dios celebran en 2020 los 15 años de vida desde su fundación en la diócesis de Cruz del Eje. Actualmente, el monasterio Purísima Madre de Dios se encuentra en la localidad de Ciénaga de Allende, a 23 km de Villa Cura Brochero.+
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