Mons. Fernández: Ver el verdadero sentido de nuestra vida

Mons. Fernández: Ver el verdadero sentido de nuestra vida

La Plata (Buenos Aires) (AICA): En su segundo video para el tiempo de cuarentena, monseñor Víctor Manuel Fernández, arzobispo de La Plata, reflexionó sobre el Evangelio del domingo 22 de marzo, que cuenta la historia del ciego de nacimiento. “Vos y yo también somos ciegos de nacimiento”, afirmó el prelado y mencionó la inmensidad de cosas que desconocemos. Por eso, pidió a Jesús “que nos haga ver el sentido de nuestra vida”.

Monseñor Víctor Manuel Fernández, arzobispo de La Plata, reflexionó sobre el Evangelio del ciego de nacimiento, en su videomensaje para el cuarto domingo de Cuaresma.

Al comenzar, invitó a la comunidad a imaginarse “lo que es ser ciego de nacimiento”: “Es alguien que jamás vio la luz, a las personas, los colores, las flores, el cielo. Ni siquiera se puede llegar a imaginar las cosas tan lindas que vemos constantemente”.

Seguidamente expresó: “Vos y yo también somos ciegos de nacimiento”, haciendo referencia a “las cosas que no vemos”, esas que están inmersas en “el universo inmenso”: “Planetas, estrellas, cosas que no llegamos a imaginar ni remotamente, un pedacito del terreno del patio con una variedad enorme de florcitas, de detalles que si no les prestás atención, no las ves. Hay tantas maravillas que no llegamos a ver”.

Somos apenas “una gotita de polvo en medio de tanta inmensidad”, afirmó monseñor Fernández. “Vos mismo no te conocés del todo. No te entendés del todo ni a vos ni a los demás”, dijo y se preguntó: “¿Cuántas veces te gustaría saber qué estará pensando mi hijo, en qué andará este amigo mío?”, porque “ni siquiera eso más cercano podés decir que lo conocés realmente”.

El arzobispo platense pidió a Jesús en este día, “que nos haga ver el sentido de nuestra vida, como se la hizo ver a este ciego. Que nos haga reconocer cuánto vale cada persona que nos encontramos cada día. Que nos haga ver las cosas lindas que Dios siembra en este mundo”.

“Cuenta el Evangelio que en un momento, después del revuelo, el ciego se quedó solo con Jesús, frente a frente”, recordó, y mencionó las escenas del Evangelio donde Jesús se queda solo con algún personaje: con la samaritana, con Nicodemo, con el ciego, y con tantos más. “Jesús le devolvió al ciego mucho más que la luz de los ojos, le dio otra luz, la luz que vos y yo necesitamos para que nuestra vida tenga sentido”, sostuvo el prelado platense.

Finalmente, invitó a los televidentes: “Ponete frente a frente con Cristo, frente a sus ojos. Ojos que miran con amor, ojos que sanan, ojos que liberan”, e hizo una oración en conjunto: “Señor Jesús: No confío demasiado en mí mismo, quiero confiar en mí mismo, quiero confiar en vos. No confío en mis propias pequeñas luces, quiero confiar en tu luz. Señor, iluminá mi camino. Voy a poner todo de mi parte. Pero me quiero dejar guiar por vos. Me confío, Señor. Sé que en tus manos todo estará bien. Amén”. Monseñor Fernández se despidió con la bendición.+

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