“Nuestro bebé se ha puesto las alas esta noche a las 2.30 de la madrugada. Tenemos el corazón roto. Gracias a todos por toda su ayuda”, escribió Kate James, mamá de Alfie, en Facebook anunciando la muerte de su hijo, el pequeño Alfie Evans, que no llegó a cumplir 2 años este 9 de mayo. Al mismo tiempo, el papá Thomas escribió: “Mi gladiador ha rendido su escudo y ganó sus alas a las 2.30. Con el corazón totalmente roto. Te amo mi bebé”.
“Estoy profundamente afectado por la muerte del pequeño Alfie. Hoy rezo especialmente por sus padres, mientras Dios Padre lo acoge en su abrazo de ternura”, escribió Francisco en un tweet.
El pequeño Alfie Evans, nació el 9 de mayo de 2016, fue desenchufado de las máquinas que le mantenían con vida el pasado lunes 23 de abril, en contra de la voluntad de sus padres, después de que los médicos declararán que “no hay cura médica” para su condición, ya que sufría de una enfermedad degenerativa irreversible. Según los especialistas, el pequeño no sobreviviría más de unos minutos sin asistencia artificial, pero continuó respirando por sus propios medios por más de 4 días.
Un juez del Tribunal Superior de Manchester denegó otra vez este martes 24 de abril, a los padres la posibilidad de trasladar a Alfie a Italia, donde se le había ofrecido continuar con su tratamiento. Los padres recibieron el respaldo del papa Francisco y del gobierno italiano, que había dado la nacionalidad al niño con la idea de trasladarlo a Roma para que siguiera recibiendo atención médica. El centro británico en el que se encontraba hospitalizado consideraba que proporcionarle más asistencia médica sería no solo “inútil”, sino “cruel e inhumano”.
El papa Francisco participó de diversas formas en los sucesos de la vida de Alfie Evans. Recibió al papá de Alfie, Thomas, en una audiencia; además difundió tres tweets y dos llamamientos, uno en el Regina Coeli y otro en la audiencia general del 18 de abril. En aquella ocasión, el Santo Padre recordó fuertemente que, “el único dueño de la vida, desde el inicio hasta el fin natural, es Dios. Y nuestro deber –dijo el Papa– es hacer de todo para custodiar la vida”. Pero sobre todo, el papa Francisco pidió a los dirigentes de su Hospital, el Hospital Pediátrico “Bambino Gesú” de Roma, de hacer lo posible para el traslado del pequeño niño inglés. Y el Hospital del Papa estaba dispuesto a trasladar, recibir y asistir al pequeño Alfie, haciéndose cargo de todos los gastos.+
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