El pontífice escribió esta carta en respuesta a una enviada por la organización católica en 2017. “La mandamos en septiembre, pero no esperábamos esto”, expresó a AICA Alejo Audissio, miembro de Manos a la Obra Rosario. “Pensábamos que quizás nos podría responder el nuncio apostólico o algún secretario. Pero llegó a las manos de Francisco y nos respondió él”, manifestó entusiasmado. “Fue una caricia al alma, el marcaje de un camino que tenemos que continuar”.
En la carta, Francisco les agradeció por haberle compartido los proyectos solidarios que los universitarios realizan, desde hace ya 8 años, vinculados a las profesiones de cada participante. “Pero gracias, sobre todo, por haber salido de ustedes mismos y ponerse en camino del encuentro de las personas necesitadas para servirlas con sus talentos”.
“Para servir hay que vencer la tentación de la indiferencia, abriendo bien los ojos y el corazón para aprender a ver en el otro a una persona con dignidad y abriendo bien las manos para acercarse a ella con respeto y generosidad, venciendo nuestro egoísmo y nuestro miedo al compromiso”, manifestó el Papa.
Asimismo, destacó la importancia de “ver en el otro a un hermano que nos incita a compartir lo que somos dándonos por entero”, y los animó a que “sigan así y luchen siempre para no enterrar sus talentos bajo la tierra del egoísmo, del beneficio o del éxito profesional”.
Finalmente, les aseguró su oración por ellos y las personas a las que ayudan, “para que sientan en todo momento el amor del Señor que nos llamó a una vida de entera y de servicio”. “Les ruego también que no se olviden de rezar por mí. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide”, concluyó.
Manos a la obra
El proyecto Manos a la Obra (MO) es un espacio donde jóvenes universitarios de entre 17 y 35 años pueden poner su talento profesional al servicio de la sociedad. Es impulsado por la Pastoral Universitaria de la arquidiócesis de Rosario.
“Nuestro objetivo es tratar de cambiar la realidad que se vive en zonas donde hay falencias. Pero trabajamos en conjunto con las personas, no hacemos asistencialismo, sino promoción humana”, explicó Alejo Audissio.
“Trabajamos con la gente a la que vamos a tratar de ayudar, es algo recíproco porque vamos con el corazón dispuesto a dar lo que tenemos, pero siempre se termina llenando de lo que nos dan”, aseguró.
En uno de los últimos proyectos solidarios de la organización que se llevó a cabo en enero de este año se inscribieron más de 450 personas. “Muchas quedaron afuera porque no nos daba el espacio físico para tener a todos los chicos juntos. Que tantas manos quieran sumarse lo tomamos como una bendición”, agradeció.
Refiriéndose a la carta, Audissio afirmó que “Manos a la Obra es un viaje de ida y esto forma parte de un camino que tenemos que seguir y tiene que ser para adelante”. Para concluir, el joven animó: “Sepan que el Papa está cerca nuestro. No pierdan la esperanza, la ilusión. El Papa no solamente es argentino, sino que está cerca de todos”.
Para contactarse con Manos a la Obra ingresar a Facebook o a la web. +
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